Los dos mandatarios copan la atención en la Cumbre, por el proceso de distensión de las relaciones bilateral
| abril 9, 2015
Los presidentes de los Estados Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, llegaron a Panamá para participar desde este viernes en la VII Cumbre Iberoamericana de presidentes.
El arribo de Obama se desarrolló en medio de severas medidas de seguridad y con la expectativa de un eventual encuentro con el presidente de Cuba, Raúl Castro, en un “cara a cara” que será significativo para el proceso de distensión que viven los dos países y que buscan generar las condiciones para una negociación que permita el restablecimiento de las relaciones diplomáticas suspendidas desde hace más de 50 años.
Obama sostiene encuentro privados con miembros de la embajada estadounidense en Panamá y se espera a primera hora del viernes el inicio de la agenda oficial que incluye una reunión bilateral con el anfitrión, Juan Carlos Varela.
El otro punto de expectativa alrededor de Obama será su posición sobre Venezuela, país que había declarado como un peligro para la seguridad nacional de Estados Unidos.
Poco después llegó a Panamá el presidente cubano, en un avión de la empresa Cubana de Aviación.
Aunque oficialmente no hay programado un encuentro diplomático bilateral, es seguro de que Obama y Castro tendrán la oportunidad de dialogar, gracias a la dinámica de la cumbre, donde serán frecuentes los encuentros.
