El juego, que sumó millones de seguidores en el mundo, es desarrollado por la empresa King que decidió llevar la vida de su mayor éxito hasta sus oficinas en Estocolmo.
| mayo 24, 2015
Candy Crush Saga es mucho más que un juego. Es una marca, un estilo, un reclamo. Más allá de los smartphones y de Facebook, ha logrado generar una estética propia irresistible para el público. Lo mismo sacan libretas que inspiran una colección de moda.
Ahora han aplicado su propia fantasía hasta a sus oficinas, para que ni el ambiente de trabajo y rutina pierda de vista el carácter especial de lo que hacen. El complejo, que acaban de desvelar en un vídeo de Youtube, se llama "El reino". Se trata del centro de operaciones de King, la empresa que creó la aplicación, en Estocolmo, Suecia.
Todo está ideado no sólo para trabajar, sino para fomentar la creatividad y la invención de nuevos proyectos: se trabaja cómodamente, pero también con alegría, entre estos sillones-roca, las cataratas de caramelo, las estanterías chillonas, los monstruos de la casa apareciendo en la sala de reuniones…
Un espacio de 6.500 metros cuadrados con 430 estaciones de trabajo, 42 salas de reuniones, un parque interior, su propia cafetería, centro de distracciones y juegos y más.
