Tensiones comerciales dominan el inicio de la Cumbre del G7

Internacional

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anfitrión del encuentro en el balneario de Biarritz, llamó a una "movilización de todas las potencias" para sofocar las llamas que devoran bosques de la Amazonía brasileña desde hace varios días.

"Debemos responder al llamado de los bosques (…), de la Amazonía, nuestro bien común (…) y por lo tanto vamos a actuar", prometió el jefe de Estado francés en un discurso a la nación retransmitido por televisión, antes de recibir a sus socios. 

 

Francia, que mantuvo un áspero pulso la víspera con su homólogo brasileño Jair Bolsonaro, ha amenazado con bloquear el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur por las "mentiras" del mandatario brasileño en materia de compromisos ambientales.

 

La   cumbre, en la que participan los líderes de Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, Italia, Canadá y Japón, estaba también dominada por un recrudecimiento de las tensiones comerciales, que, a boca de Tusk, amenazan con una "recesión" mundial.

 

"Las tensiones comerciales son malas para todos", advirtió Macron, en un mensaje dirigido a su par estadounidense, Donad Trump, quien el viernes reiteró sus críticas a la decisión del ejecutivo francés de aplicar un impuesto a las grandes empresas tecnológicas, como Google o Facebook, y amenazó con imponer en represalia nuevos gravámenes a los vinos franceses.

 

La cumbre se celebra bajo grandes medidas de seguridad y las protestas de antimundialistas y organizaciones ecologistas, que marcharon entre las ciudades vecinas de Hendaya e Irún (España). Unas 9.000 personas, según la policía, desfilaron con calma entre las dos ciudades a ambos lados de la frontera.