Aseguran que el expediente no tenía sentido y que el juez falló como debía.
| diciembre 23, 2019
Las abogadas Abril Arosemena y Gladys Quintero quienes forman parte del equipo que defiende a Federico Suarez y al empresario Rubén De Icaza, afirmaron que el expediente de la causa no tenía razón de ser y contenía errores.
Según las penalistas las auditorías presentadas por la Contraloría De La República no eran correctas y fueron desarmadas en la audiencia.