El acontecimiento tuvo lugar en los antiguos hangares de Albrook, que fue consecuencia del intento de 11 oficiales por derrocar al entonces general Manuel Antonio Noriega y entregarlo a autoridades de los Estados Unidos
| octubre 3, 2019
Para los familiares de los fallecidos aquel 3 de octubre de 1989, los oficiales encabezados por el mayor Moisés Giroldi deben ser considerados como héroes y ocupar un lugar importante en la historia hacia la vida democrática del país.
Susana Ortega, hija del teniente Ismael Ortega, recordó el propósito de una lucha que por varios años han realizado sus familias para que la fecha no sea olvidada por los panameños.
Los familiares de las víctimas de la denominada Masacre de Albrook conmemoraron este jueves, con una misa en la Iglesia Nuestra Señora de Lourdes, en Carrasquilla, los 30 años del acontecimiento que tuvo lugar en los antiguos hangares de Albrook, que fue consecuencia del intento de 11 oficiales por derrocar al entonces general Manuel Antonio Noriega y entregarlo a autoridades de los Estados Unidos.
Josué Giroldi, hijo del mayor Moisés Giroldi (jefe de la Cuarta Compañía Urraca) dijo que en todos estos años no se ha hecho nada para darle el reconocimiento a las víctimas y sus familiares.
Considera que la fecha no ha tenido el valor que esperaban en la historia del país.
Milton Castillo, en su momento, parte de las Fuerzas de Defensa, es uno de los pocos ex oficiales que acompaña cada año a los familiares de las víctimas de la Masacre de Albrook en las actividades.
Reconoce que sus compañeros fallecidos jugaron un papel de gran importancia y que ayudo al fin de la era militar en el país para dar paso al proceso democrático.
Las familias de Moisés Giroldi, Ismael Ortega, Juan Ayarza, Jorge Bonilla, Francisco Concepción, Nicasio Lorenzo, Feliciano Muñoz, Eric Murillo, Edgardo Sandoval, León Tejada y Dioclides Julio también realizaron un acto ante el monolito construido en el sector de Albrook, en memoria de los caídos.
Detalles del informe con Sergio Rivera
