La Corte Suprema anunció el jueves que suspenderá de sus funciones a Gómez y restringió su salida del país mientras dure la investigación abierta por abuso de autoridad y otros delitos.
| enero 29, 2010
PANAMÁ (AFP). La destitución temporal de la Procuradora General de Panamá, Ana Matilde Gómez, desató este viernes una avalancha de críticas contra el presidente Ricardo Martinelli por autoritarismo.
La Corte Suprema anunció el jueves que suspenderá de sus funciones a Gómez y restringió su salida del país mientras dure la investigación abierta por abuso de autoridad y otros delitos.
Gómez, quien asumió su cargo para un período de 10 años en enero de 2005 durante el gobierno del ex presidente Martín Torrijos (2004-2009), del Partido Revolucionario Democrático (PRD, socialdemócrata), fue acusada por un ex fiscal de abuso de autoridad mientras se investigaba al entonces fiscal Arquímides Sáez, procesado y encarcelado por solicitar y recibir un soborno de 2 mil balboas.
"Sigo insistiendo que me asiste el derecho. Sin embargo, en este primer paso no me ha sido reconocido, pero no significa que todo está perdido. Voy a enfrentar este proceso con dignidad", dijo Gómez tras conocer la resolución de la Corte.
La fiscal ha sido objeto de críticas por parte del presidente Ricardo Martinelli y su gobierno, que consideran que no ha actuado contra delitos de alto perfil en los que pudieran estar implicados ex funcionarios del PRD, el principal partido de la oposición.
Su destitución levantó a su vez una polvareda en la oposición, que considera que el Ejecutivo está detrás de la decisión de la Corte.
"Una democracia moderna se funda en el respeto a las instituciones y uno de esos pilares fundamentales es la independencia de la justicia y en consecuencia su no politizacion", acusó el ex primer vicepresidente y ex canciller Samuel Lewis Navarro.
"La decisión es producto de la desesperación y la gula del presidencialismo de monopolizar todos los poderes", dijo por su parte a la AFP el constitucionalista Miguel Antonio Bernal.
"Es un error creer que estamos en una democracia. Esto es una morisqueta de democracia", sentenció Bernal.
La separación de Gómez provocó también un enfrentamiento entre el gobierno y la Fiscalía por su sucesor en el cargo.
Gómez comunicó que el fiscal auxiliar, Luis Martínez, quedaría a cargo de su despacho, mientras que la Presidencia emitió un comunicado para anunciar la próxima designación de Giussepe Bonissi como nuevo Fiscal Jefe.
Habrá que esperar hasta el 4 de febrero a que se formalice la resolución, dado que la Corte examina el caso, ya que tres magistrados se abstuvieron en la votación para destituirla del cargo.
Los abogados de Gómez amenazaron por su parte con llevar el caso a la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) si los tribunales nacionales no lo examinan.
